Confederación de Trabajadores de Venezuela
La CTV ha representado una fuerza sindical de mucha importancia en los años de la cuarta republica y sus grandes logros han sido el tripartito.el salario minimo .la seguridad social y el contrato colectivo.Dos presidentes han sido casi de su imposición: Leoni y Lusinchi .Su reestructuracion y reinsercion en la vida venezolana es de mucha importancia
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La Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV) es una de las centrales sindicales de trabajadores en Venezuela fundada en 1947.JRCH.
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En la actualidad la Confederación de trabajadores ha sido considerada como una de las organizaciones que más se opone al mandato del presidente Hugo Chávez. En el 2001, dos años después de la primera elección de Chávez, su gobierno insto a la CTV a inspeccionar por primera vez en su historia las elecciones para elegir a un nuevo líder laboral. Aunque el Tribunal Supremo de Justicia se negó a comprobar dichos resultados, Carlos Ortega, el ganador, asumió la presidencia del sindicato. La Organización Internacional del Trabajo y la Confederación Internacional de Organizaciones Sindicales Libres condenaron a Chávez por inmiscuirse en los asuntos internos de la CTV.
Desde esa fecha, la CTV ha participado —como principal organizador junto a Fedecámaras— en cuatro paros nacionales intentando sacar a Chávez del gobierno, incluido el el golpe de Estado de abril de 2002 y el Paro Petrolero de diciembre de 2002 y enero de 2003.
Durante el año 2002 y 2003 la CTV recibió una serie de donaciones por parte de la Fundación Nacional para la Democracia, una organización del gobierno de los Estados Unidos.
En el 2003, fue fundada la Union Nacional de los Trabajadores (UNT) un nuevo sindicato de trabajadores en apoyo al presidente Hugo Chávez, y con el financiamiento del partido de gobierno Movimiento V República, para contrarrestar el “monopolio” de la CTV en Venezuela.
En la Actualidad (2007), el Secretario General de la CTV, Manuel Cova y el Secretario Ejecutivo para Asuntos Laborales, Alfredo Ramos, han declarado públicamente que Carlos Ortega sigue siendo el Presidente del Organismo Sindical aunque lejos de su cargo y perseguido por la Justicia Venezolana ocupa el puesto máximo del gremio.
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UEVA SOCIEDAD NRO. 83 MAYO-JUNIO 1986, PP. 172-183Venezuela: desafíos y propuestas de la
CTV
César Olarte
César Olarte:
del Movimiento Electoral del Pueblo (MEP). Actual secretario general de la Confederación
de Trabajadores de Venezuela (CTV).
Dirigente sindical venezolano. Diputado nacional en representaciónEste año se conmemoran los 50 años de la fundación de la
Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV). El autor,
al destacar este hecho, hace una breve reseña de los primeros
movimientos de protesta social de asalariados y artesanos
urbanos y rurales que condujeron a la creación de esta central
sindicales. Relata las cruentas y traumáticas luchas de los
trabajadores en sus enfrentamientos con los gobiernos
autoritarios de la época, las compañías extranjeras y la
oligarquía nacional. Luego analiza la crisis moral,
económica, política y social que vive el país y el papel que les
corresponde a los trabajadores y sus organizaciones por
superarla y hacer de Venezuela una sociedad más justa,
solidaria y participativa. El autor propone una serie de
reformas a la estructura sindical a fin de modernizarla, para
fortalecer la capacidad de respuesta, de movilización y de
combate de la clase trabajadora. Finalmente, sostiene que la
consagración del sindicato nacional por rama de actividad
pudiera ser el mejor homenaje a los trabajadores del
movimiento sindical venezolano.
Este año de 1986, la clase obrera venezolana conmemora simultáneamente dos
fechas memorables.
Por una parte, uniéndonos a todos los trabajadores del mundo, los 100 años del 1°
de Mayo de 1886. Los trabajadores norteamericanos, que desde 1827 en Boston
venían luchando por rebajar las inhumanas y esclavistas jornadas de 12 y 14 horas
diarias, solicitando en esa época la jornada de 10 horas, 60 años después, dentro de
la incansable y permanente lucha por sus derechos, cumpliendo las consignas del
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UEVA SOCIEDAD NRO. 83 MAYO-JUNIO 1986, PP. 172-183Congreso Sindical de Nueva York (1845), de la Primera Internacional en Ginebra
(1866), del Congreso Obrero de Chicago (1867) y finalmente el 4° Congreso de la
Federación de Sindicatos y Uniones de los Estados Unidos y el Canadá, en
noviembre de 1884, se lanzaron a la calle, al combate contra los explotadores, para
arrebatarles el derecho a la jornada de 8 horas diarias.
La otra fecha que este año conmemoramos es la de los 50 años de la fundación de
la Confederación de Trabajadores de Venezuela.
Mientras en los Estados Unidos, Europa y algunos países de América del Sur
(Argentina, Uruguay, Chile) el desarrollo industrial permitía y estimulaba la
formación de uniones y sindicatos y se desarrollaban sangrientas luchas para
liberar a los trabajadores de la inicua explotación del capitalismo, sacrificando con
alegría y coraje su libertad y su vida, para, bajo las banderas del socialismo, crear
un mundo mejor para los verdaderos productores de la riqueza, pero que ayer y
todavía hoy seguimos produciendo para enriquecer a una minoría egoísta
insensible, insaciable y prepotente, nuestra patria, según las palabras del
distinguido historiador Federico Brito Figueroa en "un país de hegemonía
latifundista, como una debilísima clase media rural y urbana y una abrumadora
mayoría de campesinos pobres".
Para 1881, el 80 por ciento de la población estaba radicado en el campo y el 2 por
ciento de los productores rurales (403 personas) controlaba el 60 por ciento de la
tierra cultivable, mientras el 98 por ciento de los productores tenían el resto. Los
propietarios en total eran 20.176 sobre una población de 2.075.245 habitantes. El
0,97 por ciento de la población eran los propietarios rurales.
En 1891 sólo el 19 por ciento de la población económicamente activa era clasificada
como "trabajadores urbanos" y correspondía mayoritariamente a empleados del
Estado y particulares, artesanos, profesionales y jornaleros.
Sin embargo, la influencia de las luchas sostenidas por los trabajadores en
Norteamérica y Europa se dejaba sentir en Venezuela a través de libros, artículos
de prensa, conferencias y reuniones, pero sobre todo por la presencia en nuestro
país de intelectuales socialistas y liberales de izquierda provenientes de Europa y
hasta revolucionarios fugados de Cayena, que según Brito Figueroa, eran
artesanos, publicistas, maestros de escuela y libreros.
Los primeros movimientos de protesta social
Se presentan en esa época los primeros movimientos de protesta social de
asalariados y artesanos urbanos y rurales y de desempleados, especialmente en
Caracas, donde una manifestación de desocupados, el 20 de enero de 1895 fue
reprimida por la policía y muchos participantes fueron detenidos.
El 14 de octubre de 1896, siendo Presidente de la República el general Joaquín
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UEVA SOCIEDAD NRO. 83 MAYO-JUNIO 1986, PP. 172-183Crespo, se realiza la sesión preparatoria del Congreso Obrero para fundar el
Partido Popular, estudiando dicho Congreso la propagación de la cultura popular,
sociedades cooperativas, unión de sociedades benéficas para fomentar la economía
entre las clases obreras, etc. Estos organismos son de corta duración: en 1898 dejan
de funcionar.
Citando a Hemmy Croes, "durante los años de gobierno de Cipriano Castro, 1899 a
1908, no se registran huelgas ni procesos de organización sindical". Dice Julio
Godio: "Será a partir del gobierno de Juan Vicente Gómez, desde 1908 hasta 1935
cuando el movimiento obrero venezolano entre en escena. Es decir, finaliza la larga
y prolongada fase de mutualismo, con fallidos intentos de crear partidos
populares, para pasar a una fase donde emerjan las primeras huelgas propiamente
dichas, y las primeras organizaciones sindicales proletarias".
Es que Venezuela, desde el punto de vista del modo de producción, ha cambiado.
Sergio Aranda dice que "durante el régimen del general Gómez, el capitalismo
pasa a constituirse en el modo de producción predominante en la economía
venezolana, coexistiendo con modos de producción de tipo precapitalista y
subsistemas de economía mercantil".
En ese período se realizan huelgas, se intenta una organización sindical nacional y
se firma el primer contrato, todo lo cual no indica que habían libertades políticas ni
sindicales. Por el contrario, es la combatividad, mística y desprendimiento de
héroes anónimos del sindicalismo naciente, lo que hace posible sentar las bases de
nuestro movimiento obrero.
Las acciones de los telegrafistas de marzo de 1914; las de los trabajadores del
ferrocarril inglés (The Bolívar Railway Company Limited), en Aroa, del estado
Yaracuy, en julio de 1918, cuya huelga conduce a lo que los historiadores
consideran el primer contrato colectivo, en julio de 1919; la fundación de la
Confederación General Obrera, también en 1919, en Caracas, con tres gremios
ferrocarrileros y los tranviarios, los eléctricos y los telefónicos, la cual se disuelve
en 1921; en una época (1920) en que habían 69.000 trabajadores en industrias
manufacturera y artesanal, minas, petróleo, construcción, transporte, comercio y
servidores públicos, abren el camino sindical venezolano.
El proletariado petrolero, que sufre las discriminaciones, vejámenes y atropellos de
los capataces ingleses y holandeses de las compañías extranjeras, va creando junto
con otros gremios avanzados, las condiciones de conciencia de clase del trabajador.
La acumulación de descontento y rabia contra el explotador capitalista por las
esclavistas condiciones de trato, salario, jornada, etc., y contra el gobierno
dictatorial que sirve de brazo represivo de los inhumanos patronos, conduce a las
explosiones populares, cuyos resultados casi siempre son cruentos y traumáticos y
sus consecuencias impredecibles.
En julio de 1925 se produce un paro en el garage del campamento petrolero de
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UEVA SOCIEDAD NRO. 83 MAYO-JUNIO 1986, PP. 172-183Menegrande, para apoyar un pliego de reivindicaciones para los trabajadores, que
tiene éxito al ceder la parte patronal (logran 9 horas de jornada en vez de 10; elevan
el salario mínimo de Bs. 4 a Bs. 5; servicio de medicinas y la promesa de resolver el
problema de la vivienda). A los 3 días, los trabajadores del campo hacen su
petición y van a la huelga y ésta se extiende por todo el distrito Bolívar, del estado
Zulia, logrando Bs. 2 de aumento. Después de esos conflictos venían las represalias
de los empresarios: desaparecidos, despedidos. Pero el despedido, cambiando de
nombre, pasa a trabajar a otro campo petrolero y lleva el contagio a otros
trabajadores: "Los trabajadores unidos pueden enfrentar exitosamente a los
patronos y al gobierno".
Huelga en Cabimas en agosto de 1926, actividades políticas clandestinas, represión
de la dictadura, surge la Federación de Estudiantes de Venezuela, los hechos de la
Semana del Estudiante de febrero de 1928. Más represión. Ley del Trabajo de 1928,
caricatura de ley para "cumplir" con la OIT. La invasión fallida del Falke para tratar
de derrocar a la dictadura.
Y arribamos a 1930. Década que Julio Godio califica de las izquierdas.
El Partido Comunista lanza el 1° de Mayo de 1931 su primer manifiesto.
Aparece el Plan de Barranquilla de la Agrupación Revolucionaria de Izquierda
(ARDI) del 22 de marzo de 1931. Actividades políticas y sindicales entremezcladas,
que explican la acentuada influencia partidista en el movimiento obrero
venezolano.
Muere el dictador el 17 de diciembre de 1935 y ocupa la presidencia el general
Eleazar López Contreras.
Se inicia 1936 con manifestaciones crecientes de descontento y de reclamos por
democracia y libertad.
El 14 de febrero el gobernador Galavís disuelve a tiros una manifestación en la
Plaza Bolívar de Caracas. Muertos y heridos, represión que en vez de bajar, eleva el
tono de la protesta popular. En la tarde del mismo día 50.000 personas desfilan
desde la Universidad hasta Miraflores, protestando y exigiendo la restitución de
las garantías y la eliminación del gomecismo incrustado en el gobierno. Políticos,
universitarios, profesionales y trabajadores constituyen la marcha, cuyo resultado
es, aunque poco duradero, un triunfo popular: restablecimiento de las garantías y
el "Programa de Febrero". Surge el Movimiento de Organización Venezolana
(ORVE), continuación de ARDI. Se acelera el proceso de organización sindical. El
16 de julio se promulga la Ley del Trabajo vigente hasta hoy con modificaciones.
En noviembre de 1936, el Comité Organizador del I Congreso de Trabajadores de
Venezuela, a nombre de la Confederación Sindical Obrera y la Asociación Nacional
de Empleados (ANDE), lo convoca para el 25 de diciembre de 1936.
N
UEVA SOCIEDAD NRO. 83 MAYO-JUNIO 1986, PP. 172-183En el Zulia, como lo calificaba ORVE, "nuestro más fuerte baluarte
antimperialista", los recién creados ANDE, Sindicato Petrolero de Cabimas, la
Unión de Sindicatos Petroleros y la Unión de Trabajadores del Zulia que agrupaba
a los más importantes sindicatos de la región, intensifican su trabajo de
organización, denuncia y protesta sindical y política, frente a las maniobras y
atropellos de las compañías y el gobierno.
La agitación laboral crecía. La negativa de las empresas a discutir los pliegos de
peticiones presentados, conduce a la huelga. El 9 de diciembre arranca Cumarebo
(Falcón) y el 12 los petroleros y marinos del Zulia, con la solidaridad activa del
pueblo, que suministraba comida a los huelguistas y alojamiento para sus hijos.
El 26 de diciembre se instala en Caracas el I Congreso de la Confederación
Venezolana del Trabajo (CVT), se solidariza con la huelga petrolera y el 31 de
diciembre de 1936, a las 11 y 57 minutos de la noche, cuando el resto de la
población esperaba al calor de sus hogares el cañonazo que anunciara el inicio de
1937, se proclama la flamante CVT.
Pocos días después de finalizada la huelga, de 42 días, es disuelta la CVT y los
partidos. Se impone de nuevo el autoritarismo y la represión.
En 1941 llega a la presidencia el general Isaías Medina Angarita y comienza una
política de apertura democrática y nuevo auge del sindicalismo.
El 22 de marzo de 1944 se instala públicamente, en el Nuevo Circo de Caracas, la
Convención Sindical Nacional, convocada por la Unión Sindical Petrolera de
Venezuela, la Unión de Trabajadores del Zulia y la Federación Sindical del Distrito
Federal, para refundar la CVT, dentro de una campaña reaccionaria impulsada por
los círculos norteamericanos y la gran burguesía nacional, que a través de La
Esfera , atacaban a los dirigentes sindicales, acusándolos de preparar una
"conspiración comunista".
El 24 de marzo, horas después de reactivada la CVT, un decreto gubernamental
disuelve la Convención y a 91 de los 150 sindicatos y federaciones que la
conformaban.
El 18 de octubre de 1945, es derribado el régimen de Medina Angarita y asume el
poder la Junta Revolucionaria de Gobierno, presidida por Rómulo Betancourt, la
cual establece un régimen de amplias libertades políticas y sindicales que
estimulan la creación y fortalecimiento de sindicatos, la contratación colectiva, etc.
El 14 de noviembre de 1947 se instala el II Congreso de Trabajadores de Venezuela,
y se constituye la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV), bajo la
presidencia de Bernardo Pérez Salinas. Dura en actividad legal hasta el golpe de
Estado del 24 de noviembre de 1948, que derroca al presidente Rómulo Gallegos.
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UEVA SOCIEDAD NRO. 83 MAYO-JUNIO 1986, PP. 172-183Vienen 10 años de resistencia a la tiranía, en la cual los dirigentes sindicales
sufrieron de nuevo persecuciones, cárcel, destierro y muerte.
Caída la dictadura de Pérez Jiménez, el Comité Sindical Unificado Nacional asume
en 1958 la dirección y reorganización del movimiento obrero y el 13 de noviembre
de 1959 se instala el III Congreso de la CTV, el congreso unitario por excelencia,
presidido por el hoy presidente de la CTV, compañero Juan José Delpino. Elige un
Comité Ejecutivo unitario, presidido por José González Navarro.
El IV Congreso de la CTV se reúne el 10 de diciembre de 1961, expulsa a los
dirigentes sindicales del Partico Comunista de Venezuela, Unión Republicana
Democrática y el Movimiento de Izquierda Revolucionaria, como reflejo de la
violenta situación política existente en los años 60, de todos conocida y hoy
felizmente superada. Reelige a José Gonzalo Navarro como presidente. Igual lo
hace el V Congreso, el 22 de noviembre de 1964.
El VI Congreso se reúne el 21 de octubre de 1970, eligiendo como presidente a
Francisco Olivo. El VII, el 25 de abril de 1975, que designa a José Vargas como
presidente. El VIII, el 9 de octubre de 1980, que reelige a Vargas y el IX, en mayo
del año pasado que elige a Juan José Delpino.
Esta sucinta reseña, sin entrar en análisis económicos, políticos y sociales, sin
mencionar los nombres de los protagonistas, para no incurrir en la posibilidad de
omitir alguno, me ha parecido conveniente, aun corriendo el riesgo de abusar de la
paciencia del lector, para refrescar la memoria de quienes por haber vivido o leído,
lo conocen, como para hacer conocer de quienes por jóvenes lo ignoran, el calvario
de penalidades que ha recorrido nuestro movimiento sindical para llegar a lo que
es y significa hoy.
Crisis moral, económica y política
Pero la historia no puede ser sólo para conocer el pasado, para compartir la
emoción de las luchas y peligros de los héroes de ayer y para solazarnos en las
condiciones infinitamente superiores de hoy.
Debemos tomar la historia para reconocer y valorar las virtudes de quienes, frente
a toda clase de obstáculos, sacrificando comodidades, sufriendo cárceles y exilios y
arriesgando su vida, nos abrieron el camino. Debemos comparar las condiciones de
ayer con las de hoy y reconocer que el progreso nos ha hecho cómodos, la falta de
esfuerzo ha ablandado nuestros músculos.
El facilismo, el oportunismo y el inmediatismo han abierto en algunos el campo
para buscar posiciones de comando y seguridades económicas, no con el trabajo
constante, la consecuencia, la mística, el desprendimiento, la disciplina y el estudio,
sino a través de procedimientos que evaden los principios éticos y morales, y que a
VER;